Existen varios métodos para medir la huella hídrica. En Green Wise utilizamos el método desarrollado por la Water Footprint Network (Hoekstra and Chapagain, 2008) para medir nuestro consumo de agua directa e indirecta para la generación de productos o servicios.

Este método permite visualizar el consumo oculto de volumen de agua de los productos en su elaboración y a lo largo de toda su cadena logística.

El consumo de agua se lo clasifica en tres tipos de huellas hídricas: azul, verde y gris.

Corresponde al consumo de agua de la superficie y subterránea a lo largo de toda la cadena logística del producto.
Para este caso, consumo se refiere a toda pérdida de agua del área de captación de la misma, sea de la superficie o subterránea.
Pérdida de agua ocurre cuando esta se evapora, regresa a otra área de captación, al océano o se la incorpora al producto.

Corresponde a todo el consumo de volumen de agua lluvia.

Corresponde a todo el volumen de agua fresca que se requiere para asimilar la carga de contaminantes, dada su concentración en agua natural y los estándares de calidad de agua.

No es una medida de la severidad de los impactos locales del consumo de agua y contaminación.

La severidad depende de la vulnerabilidad del sistema de agua local, su número de consumidores y contaminadores.

Considerar y mitigar la huella hídrica de su negocio es una medida que:

Permite disminuir el riesgo operacional de la empresa por la escasez del agua

Permite implementar una estrategia frente al manejo de agua

Evalúa los aspectos dentro de la empresa que constituyen un riesgo importante para la gestión del agua

Demuestra transparencia hacia sus grupos de interés

Las compañías que: disminuyan riesgos antes que la competencia, generen transparencia con sus productos y se fijen objetivos claros y medibles; podrán traducirlo en una ventaja competitiva.